¡Seis años de Vanguardia del Sur!
Los propietarios de este multimedio, Alcides Quiroga, Marcelo Del Valle Romero y Gabriel Prieto escribieron estas palabras contando la sorprendente experiencia de hacer este medio líder en la comunicación social de la región.
La Vanguardia del Sur
Cuando nacimos el 20 de agosto de 2011, ni siquiera sabíamos, ni imaginábamos el futuro. No sólo el nuestro, el futuro personal relacionado con la forma de trabajar.
Ni siquiera imaginábamos el "futuro" que ya está acá, hoy, en el presente, en este 2017 tan conflictivo en nuestra atribulada Santa Cruz, en nuestra Caleta Olivia que no encuentra salida a sus múltiples traumas sociales y políticos. Pero estamos, y de qué manera.
Los que hacemos LVS, ni siquiera imaginábamos que las redes sociales iban a ocupar un lugar casi central en nuestra forma de comunicar. Los dos periodistas Alcides Quiroga y Marcelo Romero, que ideamos hacer un portal, allá por julio de 2011, habíamos dialogado y soñado mientras íbamos a cubrir una protesta en el puerto.
Veníamos de la prensa gráfica, la de papel, y teníamos esa "gimnasia" del oficio de hacer todo con el límite de la hora del cierre, ni siquiera imaginábamos que a partir del 20 de agosto de 2011, nunca íbamos a tener hora de cierre, que nunca íbamos a tener el descanso sabatino o dominical.
La prensa en papel, en aquel año, había iniciado su declinación ante el avance de los diarios digitales, y cada vez se iba empequeñeciendo el lugar para los laburantes. A esto, hoy lo seguimos observando con los despidos en diversos diarios regionales y nacionales, con la desaparición de periódicos, y con la merma de sus ediciones.
Principiamos este medio de una manera casi artesanal, era casi un blog, hasta que empezamos a convocar a webmasters de Comodoro y de esta misma ciudad para que nos ayudaran a darle forma.
Ni siquiera teníamos en cuenta que había que abrir una cuenta en Facebook (red social que recién estaba adquiriendo la centralidad en las relaciones comunitarias como la vemos ahora).
También nos acostumbramos a no tener un lugar físico principal para nuestro trabajo. "Subíamos" las notas (y aún lo seguimos haciendo), en donde nos "agarre la noche", en donde nos sorprendía la noticia urgente, desde nuestros hogares, desde la radio, o acaso hasta desde un lugar público. Los que comprenden el "teletrabajo" saben que esto es así, es casi ser ubicuos.
Aunque también sabemos que ustedes valoran nuestro trabajo porque estamos en "El Lugar", con nuestra presencia física en donde suceden los hechos, que es la forma más concreta de hacer periodismo. Los tiempos y la tecnología transmutarán, pero este oficio se hará siempre así por los siglos de los siglos: yendo al lugar, hablando con los protagonistas o con los testigos.
De todas formas, con la incorporación como compañero de ruta de Gabriel Prieto, diseñador, se tomó atención a todas esas cuestiones de comunicar en las redes. Y más aún cuando el teléfono celular, hace pocos años, se convirtió en el principal canal para abrir este diario, detrás de las computadoras.
Así también se fue renovando el diseño con webmasters de Córdoba y Buenos Aires, a quienes tuvimos que recurrir por la gran demanda de aplicaciones: diagramación para celulares, encuestas, entre otras.
Y además fuimos incorporando, de manera vertiginosa, otros elementos: Twitter, videos en vivo, youtube, edición de imágenes.
Después, consideramos necesario tener nuestra propia voz en la radio, medio de comunicación que tiene una gran presencia en los hogares caletenses. Y así fue que Radio Hora Prima nos abrió las puertas para ocupar el horario central, de 10 a 13 horas.
Al final, de diario digital fuimos creando un multimedio.
Con absoluta sinceridad les decimos que nos fue asombrando y maravillando la repercusión en la comunidad de Caleta y en otras localidades. Con cierta alegría y orgullo escuchamos muchas veces, (sin que se percataran de la presencia de los que hacemos LVS), en la calle, en los lugares de espera en instituciones, en un taxi, o en donde sea, que se dice: "Lo leí en La Vanguardia"; "Fijate si aparece la noticia en La Vanguardia".
A la vez, empezamos a ser convocados y mencionados en otros medios regionales y nacionales por nuestras publicaciones acerca de los acontecimientos en Caleta, y en otras ciudades de la Provincia.
De todas maneras, por un lado era orgullo, y por el otro un ánimo diferente, de circunspección y de suma humildad: el ánimo de la responsabilidad. Y eso causa cierto temor al principio: "Bueno, tenemos enorme audiencia, eso significa generar una respuesta acorde a lo que se genera en el portal".
No es fácil. Es una lucha cotidiana. Qué decir de tal cosa, cómo decirlo. La sociedad está cambiando continuamente, y lo que antes se publicaba hoy ya tiene sus nuevos códigos deontológicos; y lo que antes no se decía, hoy ya puede hablarse. En ese magma movedizo de la opinión pública nos movemos, y es difícil mantener el equilibrio y la ecuanimidad, y nos equivocamos algunas veces (claro que sí), pero les aseguramos que hacemos todos los días una reflexión honesta sobre nuestra importante función en la comunidad.
Como guía de esa responsabilidad siempre hemos contado con los comentarios bienintencionados, los cientos de mensajes que recibimos a diario desde todos los medios: whatsapp, llamados telefónicos, mensajes a la fan page.
Pero hemos hablado por parte de los tres responsables de este medio. Queremos también mencionar a todos los que incorporan sus mentes y corazones para aportarles a ustedes, a redactores como Roberto Méndez, Facundo Péreztoro, Dana Moreno; nuestra locutora Carolina Aliaga, al operador técnico Reinaldo Duarte; y a todos aquellos espontáneos colaboradores que surgen con sus columnas de opinión, o aquellos caletenses que viajan por el mundo y quieren ser parte de este gozoso trabajo de comunicar desde distintas partes del mundo, como sucedió recién desde Bulgaria, o desde China.
¡Infinitas gracias, y que Dios bendiga a nuestra Patagonia!
Firman:
Alcides Quiroga, Marcelo Del Valle Romero, Gabriel Prieto
Editores generales de La Vanguardia del Sur
Fuente: La vanguardia del sur
La Vanguardia del Sur
Cuando nacimos el 20 de agosto de 2011, ni siquiera sabíamos, ni imaginábamos el futuro. No sólo el nuestro, el futuro personal relacionado con la forma de trabajar.
Ni siquiera imaginábamos el "futuro" que ya está acá, hoy, en el presente, en este 2017 tan conflictivo en nuestra atribulada Santa Cruz, en nuestra Caleta Olivia que no encuentra salida a sus múltiples traumas sociales y políticos. Pero estamos, y de qué manera.
Los que hacemos LVS, ni siquiera imaginábamos que las redes sociales iban a ocupar un lugar casi central en nuestra forma de comunicar. Los dos periodistas Alcides Quiroga y Marcelo Romero, que ideamos hacer un portal, allá por julio de 2011, habíamos dialogado y soñado mientras íbamos a cubrir una protesta en el puerto.
Veníamos de la prensa gráfica, la de papel, y teníamos esa "gimnasia" del oficio de hacer todo con el límite de la hora del cierre, ni siquiera imaginábamos que a partir del 20 de agosto de 2011, nunca íbamos a tener hora de cierre, que nunca íbamos a tener el descanso sabatino o dominical.
La prensa en papel, en aquel año, había iniciado su declinación ante el avance de los diarios digitales, y cada vez se iba empequeñeciendo el lugar para los laburantes. A esto, hoy lo seguimos observando con los despidos en diversos diarios regionales y nacionales, con la desaparición de periódicos, y con la merma de sus ediciones.
Principiamos este medio de una manera casi artesanal, era casi un blog, hasta que empezamos a convocar a webmasters de Comodoro y de esta misma ciudad para que nos ayudaran a darle forma.
Ni siquiera teníamos en cuenta que había que abrir una cuenta en Facebook (red social que recién estaba adquiriendo la centralidad en las relaciones comunitarias como la vemos ahora).
También nos acostumbramos a no tener un lugar físico principal para nuestro trabajo. "Subíamos" las notas (y aún lo seguimos haciendo), en donde nos "agarre la noche", en donde nos sorprendía la noticia urgente, desde nuestros hogares, desde la radio, o acaso hasta desde un lugar público. Los que comprenden el "teletrabajo" saben que esto es así, es casi ser ubicuos.
Aunque también sabemos que ustedes valoran nuestro trabajo porque estamos en "El Lugar", con nuestra presencia física en donde suceden los hechos, que es la forma más concreta de hacer periodismo. Los tiempos y la tecnología transmutarán, pero este oficio se hará siempre así por los siglos de los siglos: yendo al lugar, hablando con los protagonistas o con los testigos.
De todas formas, con la incorporación como compañero de ruta de Gabriel Prieto, diseñador, se tomó atención a todas esas cuestiones de comunicar en las redes. Y más aún cuando el teléfono celular, hace pocos años, se convirtió en el principal canal para abrir este diario, detrás de las computadoras.
Así también se fue renovando el diseño con webmasters de Córdoba y Buenos Aires, a quienes tuvimos que recurrir por la gran demanda de aplicaciones: diagramación para celulares, encuestas, entre otras.
Y además fuimos incorporando, de manera vertiginosa, otros elementos: Twitter, videos en vivo, youtube, edición de imágenes.
Después, consideramos necesario tener nuestra propia voz en la radio, medio de comunicación que tiene una gran presencia en los hogares caletenses. Y así fue que Radio Hora Prima nos abrió las puertas para ocupar el horario central, de 10 a 13 horas.
Al final, de diario digital fuimos creando un multimedio.
Con absoluta sinceridad les decimos que nos fue asombrando y maravillando la repercusión en la comunidad de Caleta y en otras localidades. Con cierta alegría y orgullo escuchamos muchas veces, (sin que se percataran de la presencia de los que hacemos LVS), en la calle, en los lugares de espera en instituciones, en un taxi, o en donde sea, que se dice: "Lo leí en La Vanguardia"; "Fijate si aparece la noticia en La Vanguardia".
A la vez, empezamos a ser convocados y mencionados en otros medios regionales y nacionales por nuestras publicaciones acerca de los acontecimientos en Caleta, y en otras ciudades de la Provincia.
De todas maneras, por un lado era orgullo, y por el otro un ánimo diferente, de circunspección y de suma humildad: el ánimo de la responsabilidad. Y eso causa cierto temor al principio: "Bueno, tenemos enorme audiencia, eso significa generar una respuesta acorde a lo que se genera en el portal".
No es fácil. Es una lucha cotidiana. Qué decir de tal cosa, cómo decirlo. La sociedad está cambiando continuamente, y lo que antes se publicaba hoy ya tiene sus nuevos códigos deontológicos; y lo que antes no se decía, hoy ya puede hablarse. En ese magma movedizo de la opinión pública nos movemos, y es difícil mantener el equilibrio y la ecuanimidad, y nos equivocamos algunas veces (claro que sí), pero les aseguramos que hacemos todos los días una reflexión honesta sobre nuestra importante función en la comunidad.
Como guía de esa responsabilidad siempre hemos contado con los comentarios bienintencionados, los cientos de mensajes que recibimos a diario desde todos los medios: whatsapp, llamados telefónicos, mensajes a la fan page.
Pero hemos hablado por parte de los tres responsables de este medio. Queremos también mencionar a todos los que incorporan sus mentes y corazones para aportarles a ustedes, a redactores como Roberto Méndez, Facundo Péreztoro, Dana Moreno; nuestra locutora Carolina Aliaga, al operador técnico Reinaldo Duarte; y a todos aquellos espontáneos colaboradores que surgen con sus columnas de opinión, o aquellos caletenses que viajan por el mundo y quieren ser parte de este gozoso trabajo de comunicar desde distintas partes del mundo, como sucedió recién desde Bulgaria, o desde China.
¡Infinitas gracias, y que Dios bendiga a nuestra Patagonia!
Firman:
Alcides Quiroga, Marcelo Del Valle Romero, Gabriel Prieto
Editores generales de La Vanguardia del Sur
Fuente: La vanguardia del sur
No hay comentarios.